Jicotea
Se llama así al dedo del pie cuando se sale por un agujero del calzado. Porque el dedo que así asoma semeja la cabeza de la jicotea o tortuga cuando sale de la concha. (Un catauro de cubanismos, Fernando Ortiz, 1923)
Con estas definiciones, ¿a quién se le ocurre elegir ese nombre para una colección de libros de Media Vaca? Por extraño que parezca, este es el único nombre posible. En realidad, los libros pensados para esta colección —que tampoco son tantos— podrían pertenecer, por su contenido, a Libros para niños; por su sentido del humor, a Últimas lecturas; por su tamaño, a Grandes y pequeños; y, por supuesto, a Fuera de colección.
La palabra remite a Cuba, y la colección cumple esa condición geográfica como la cumplió en su momento su hermana pequeña, la 1/2 Vaca Cubana. Pero se sale como el dedo del pie de lo publicado hasta ahora porque se asoma a la música, y la suma a la lectura de las imágenes y los textos. Aunque no todos los libros de la colección lo incluyan, algunos contienen esos objetos ya del pasado que son los CD. Los discolibros son seguramente tan poco habituales como apreciados por quienes huimos de los algoritmos y adoramos las matemáticas.
Un palpitante esfuerzo de fijar y hacer corpóreo lo intangible.
Dibujo de Marta Pina
